Creo que a la mayoría de niños les gusta el dulce.  Yo prefiero que mi hija coma postres hechos en casa que alguno comprado o algún dulce o caramelo.  Es niña, y no voy a negar que cuando vamos a un cumpleaños quiere comerse el chupete, las gomitas, las frunas, etc.  Y siempre le digo que prefiero que se coma una trufa o un alfajor que uno de esos dulces.  Igual creo que siempre es bueno que haya un balance.  Yo no le compro esas cosas pero en la casa si preparamos postres y siempre trato de usar ingredientes un poco más “sanos” por así decirlo.  Si algo lleva azúcar blanca prefiero reemplazarlo por panela o miel, si algo tiene harina normal prefiero reemplazarla por harina de avena o harina integral.  Es por eso que hace unos días preparando postres más caseros intenté con esta receta y me gustó mucho como quedó.  

Ingredientes

• ½ taza de quinua cruda previamente lavada
• 1 taza de agua
• 1 taza de leche fresca (Pueden reemplazarla por leche de almendras)
• ½ taza de panela
• ¼ taza de almendras peladas y molidas*
• 1 yema de huevo
• 2 ramitas de canela
• 2 clavos de olor
• Canela en polvo para decorar

* Tip: Remojar las almendras en agua caliente durante 5 - 10 minutos para poder pelarlas fácilmente.  Luego picar o meterlas al procesador.

Preparación

1. En una olla poner la quinua, el agua, las ramas de canela y clavo de olor.  Mover y tapar.  Una vez que empiece a hervir, bajar el fuego y cocinar por 20 minutos.
2. Una vez lista, agregar la leche y las almendras y volver a tapar.  Hervir a fuego bajo por 15 minutos más.  Lo ideal es que la quinua esté bien reventada.
3. Agregar la panela y mezclar.  Retirar las ramas de canela y los clavos de olor.
4. Retirar del fuego y agregar la yema de huevo.  Mezclar bien y tapar por 5 - 10 minutos.
5. Servir con canela en polvo.

* Tip: Siempre acuérdense cuántos clavos de olor y cuántas ramas de canela echaron para sacarlas antes de servir y evitar que alguien las muerda.